Traumatismos Oculares
¿Qué es un trauma ocular?
El trauma ocular constituye la primera causa de ceguera monocular, o sea, de un solo ojo. Su mejor tratamiento es la prevención.
Pueden ocurrir en la infancia o edad escolar, aunque es más frecuente, sobre todo, en hombres jóvenes de mediana edad (20 a 50 años) y las causas del trauma pueden ser varias:
- Laboral
- Deportivo (es el más frecuente)
- Doméstico
- En vía pública
Clasificación
Según la Academia Americana de Oftalmologia (AAO), los traumas se pueden clasificar en:
A- Trauma contuso (por ejemplo, con un puno o una pelota):
- Con rotura de globo ocular.
- Sin rotura de globo ocular.
B- Trauma penetrante (por ejemplo: con un vidrio o arma blanca):
- Penetrante (se ve solo una herida de entrada al globo ocular).
- Perforante (se ve una herida de entrada y una de salida en el globo ocular).
En los traumas punzantes puede quedar dentro del ojo restos del objeto que produjo el trauma, a lo que llamamos cuerpo extraño intraocular (CEIO).
¿Qué debo hacer ante un trauma?
Luego de ocurrido el traumatismo, sea el tipo que fuere, se recomienda concurrir a una consulta con el médico oftalmólogo de manera URGENTE, ya que se trata de una urgencia oftalmológica.
Nunca tocar el ojo, ni colocar gotas sin prescripción médica.
¿Qué hace un oftalmólogo ante un trauma?
La primera consulta al especialista es de vital importancia ya que marcara la conducta a seguir y a tener un panorama del pronóstico.
El oftalmólogo evaluará:
- Agudeza Visual
- Movimientos oculares
- Reflejos oculares
- Biomicroscopía (evaluación de parte externa de globo ocular con lampara de hendidura)
- Presión intraocular
- Fondo de ojos o FO (evalúa humor vitreo, retina, vasos retinales y nervio óptico)
Todo lo mencionado se precede de un correcto interrogatorio principalmente de lo sucedido.
El examen oftalmológico mencionado se sucede, a criterio médico, de exámenes complementarios pertinentes, pudiendo ser estos: Ecografía Ocular, Tomografía de Coherencia Óptica Macular, Tomografía Computada, Resonancia Magnética.
En caso de sospecha de cuerpo extraño intraocular, se contraindica la realización de la Resonancia Magnética.
Tipos de trauma
A- Trauma ocular contuso:
Ante un trauma contuso, las diferentes fuerzas de compresión y descompresión del globo ocular, pueden producir roturas (laceraciones) o no (contusión) de las paredes del ojo.
Entre las lesiones que pueden producirse en un trauma contuso están:
- Hipema (sangre en la cámara anterior): provoca disminución de la agudeza visual dependiendo del grado de compromiso.
- Luxación o subluxación del cristalino.
- Retroceso del ángulo de la cámara anterior que a futuro puede provocar glaucoma traumático.
- Diálisis retinal: es un tipo de desprendimiento de retina.
- Desgarro o agujero retinal que puede derivar en un desprendimiento de retina.
- Desprendimiento de Retina.
- Hemorragias Retinales o Vitreas.
- Roturas coroideas.
- Injuria del nervio óptico.
- Edema macular.
- Agujero macular.
Frente a un traumatismo contuso, que permite la observación del Fondo de Ojo (FO) y la evaluación de las lesiones presentes, se establecerá la conducta clínica o quirúrgica en forma programada, por ejemplo, para tratar un desprendimiento de retina o una hemorragia en vítreo.
Si no es posible observar el FO se solicitará una Ecografía ocular para evaluar el estado anatómico de todo el segmento posterior y se tomará la conducta clínica o quirúrgica según los hallazgos.
B- Trauma ocular punzante:
El trauma ocular punzante siempre lleva a un pronóstico visual y anatómico más reservado que el contuso.
El tratamiento es siempre quirúrgico y su primer objetivo es el cierre primario o reparación primaria del globo ocular.
Dependiendo del caso, se programará un segundo procedimiento para el tratamiento de las complicaciones.
Ante la presencia de un cuerpo extraño intraocular, el pronóstico visual siempre es reservado.
Los estudios de imágenes como la radiografia simple, Ecografía ocular, Tomografia Computada y Resonancia Nuclear Magnetica (RMN) confirman la presencia y establecen su localización (intraocular u orbitaria).
La RMN está contraindicada en casos de CEIO metálicos.
Conclusiones
El trauma ocular es una urgencia médico-oftalmológica, por lo que su consulta debe realizarse a la brevedad.
Su pronóstico siempre es reservado. El resultado visual y anatómico del caso final dependerá de la primera evaluación preoperatoria rigurosa, la estrategia quirúrgica adecuada y el seguimiento del caso.
El ojo traumatizado puede presentar complicaciones a corto, mediano y largo plazo.
Los controles oftalmológicos periódicos resultan fundamentales.
Más información
Conozca más detalles sobre los traumatismos oculares en estas entrevistas de las periodistas Karina Mazzocco "Pura Vida, Cada Día" (TV Pública) y Daniela Fernández ("TV Crecer") al Prof. Dr. Marcelo Zas.